¡Alerta de autocuidado! El chequeo de lunares: Una cita de amor con tu piel

¿Sabías que el cáncer de piel es el más común a nivel mundial? Según la Academia Estadounidense de Dermatología (AAD), se estima que aproximadamente uno de cada cinco estadounidenses desarrollará cáncer de piel en algún momento de su vida.

En el ajetreo diario, a menudo descuidamos nuestra propia salud. Nos preocupamos por el trabajo, la familia, las obligaciones… Pero olvidamos que nuestro cuerpo es un templo. Por ello, quiero hablarles de un tema fundamental para la prevención del cáncer de piel: el chequeo de lunares.

“El cáncer de piel es curable en etapas tempranas, por lo que la detección temprana es crucial. El autoexamen regular de la piel y las visitas anuales al dermatólogo son esenciales para detectar cualquier cambio sospechoso y recibir tratamiento a tiempo.» – Dra. Stacy Dugan, presidenta de la Academia Estadounidense de Dermatología (AAD).

Por eso, el chequeo de lunares es una cita de amor con tu piel, una oportunidad para detectar cualquier anomalía a tiempo y aumentar las posibilidades de un tratamiento exitoso.

¿Cómo hacerlo?

  • Autoexamen: Una vez al mes, revisa tu piel desnuda frente a un espejo, prestando atención a cualquier cambio en la forma, el tamaño, el color o la textura de tus lunares.
  • Consulta dermatológica: Una vez al año, acude a un dermatólogo para que revise tu piel en profundidad y detecte cualquier lunar sospechoso.

¿Qué debo buscar a la hora de realizar el autoexamen?

De acuerdo con la Academia Estadounidense de Dermatología, la regla del ABCDE es una herramienta para detectar el cáncer de piel a tiempo y nos indica que debemos revisar a la hora de realizar el autoexamen:

  •  Asimetría: Si un lunar es asimétrico, es decir, una mitad no se parece a la otra, puede ser una señal de alerta.
  • Bordes: Los bordes irregulares, borrosos o dentados también pueden indicar un problema.
  • Color: Los lunares que cambian de color, se vuelven más oscuros o presentan varios colores diferentes, deben ser revisados por un dermatólogo.
  • Diámetro: Si un lunar crece rápidamente o alcanza un diámetro mayor de 6 milímetros, es importante consultarlo.
  • Evolución: Cualquier cambio en la apariencia o el comportamiento de un lunar debe ser motivo de consulta médica.

Cuida tu piel, no dudes en consultar a un dermatólogo si notas cualquier cambio y asegúrate de protegerla del sol. ¡Tu bienestar es lo más importante!

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